Me han acompañado por años ; los he tenido en todas partes
en mis oficinas , en mis bibliotecas , en mi cocina , en mi mesa
de noche , en el baño y hasta en el carro.
Cada vez que los observo ; desde su silencio imperturbables ,
me recuerdan la máxima leccion de Vida : Ver , Oír y Callar !
Cuando aprendemos a conjugar estos verbos simultáneamente
en primera persona aprendemos a controlar y redirigir la energía
que cada día se nos entrega como una plastilina a un niño ; para
que al moldearla , diseñemos nuestro mañana ; no siempre los he tenido a mano y vaya que
si he metido la pata en esos días , al no tener a mis monos guías , mis monos sabios de cada día.
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